Pensando, charlando con amigas, una, dos, tres, mil que te vienen con el clásico dilema: "Es un pelotudo, pero me encanta". Y vos que ya la escuchaste, pero que cada situación que ella te describe eufóricamente te resulta novedosa y diferente y, por supuesto, digna de ser analizada nuevamente por ambas en un intento de comprender por qué los humanos tendemos a colgarnos tanto de lo que sabemos que no nos conviene, nos engorda, nos quema las neuronas o nos saca granos hasta en el orto. Y ni te cuento si es reunión de varias amigas.-
Empiezan: lo que le dijo, lo que no le dijo, lo que le debería haber dicho, lo que le tiene que decir la próxima vez que lo vea caminando de la mano de esa turra mal teñida..de ahí se derivan los 81 insultos (preferentemente con tintes de violencia) hacia la nami enemiga, más comunmente denominada como "esa", "la otra" o "la puta". Obviamente vos intentás contribuir con un aporte de varios adjetivos calificativos que resulten despectivos, injuriosos y bañados en la más retorcida bronca que jamás haya existido, como para dejarla tranqui a tu amiga que cuando necesite descargarse, ahí estarás.
Otro tema: el analisis de lo que ÉL dijo. Siempre estan las boludas que tiran un: "Mmm..es obvio que si te dijo eso, es porque MUERE por vos!", o el típico "Date cuenta, te está tirando onda"...cuando el pobre flaco no hizo más que preguntarle si sabía donde quedaba el aula T204 y después de escuchar las indicaciones le respondió con un "Gracias, nos vemos". (AAAAAAAAAAAAY, si te dijo nos vemos es porque sueña con sacarte la bombachaaa!!)
Y sí, en las reuniones de amigas están TODAS. Las que se hacen la película con todo ("¡Te ama! Se quiere casar con vos y tener ocho hijos y un perro que se llame Bobby"), las que analizan psicológicamente cada frase ("Ese pibe tiene un clarísimo complejo de Edipo, boluda, date cuenta"), las que te pinchan el globo ("Ah pará, ¿Estás hablando de Mateo? Yo lo ví el otro día caminando con una rubia.."), las amigas "sobreprotectoras" que nunca aceptaron, aceptan ni aceptarán a ninguno de tus chongos ("Vos te merecés algo MUCHO mejor que ese pelotudo, haceme caso"), las que intentan contentarte con una frase armada ("Esas cosas llegan cuando uno menos las espera", "Después de la tormenta, siempre sale el sol", y el quemadísimo"Ya va a llegar..") y finalmente las que esperan a que termines de contar todo para bombardear al grupo con sus problemas, sin importar nada de lo que hayas dicho ni las conclusiones que el resto puedan sacar de ello. Éstas últimas suelen tirar frases claves para retener la atención de todas, incluso de las que no estaban escuchando (.."Chicas, creo que estoy embarazada de mi primo").
En fin, luego de una larga charla llena de críticas, mate, grasas trans, lamentos, complejas descargas y mucha nicotina, siempre llegás a la conclusión de que tus amigas son tus amigas por algo. Porque cuando vos estés en ese lugar, ellas van a estar ahí para sostenerte, porque dentro de un par de meses tal vez termines llamándolas desesperadamente para que acudan a rescatarte, o porque simplemente las necesitas, como necesitás clavarte un mc bajon un par de veces al mes (o a la semana).
Y lo primero que haces es ponerte a pensar en que aunque hoy estés acompañada, vos sentiste alguna vez esa soledad; y que a tu fiel amiga después de una ruptura (de relación o de corazón) indudablemente la esperan varios gastos: los kilos de helado preferentemente caro, los alquileres de comedias románticas pelotudas que le van a resultar todas iguales a SU historia (y que probablemente la van a hacer llorar), los atados de cigarrillos, las salidas pedorras en un intento de subir el ánimo (que incluyen tequilas berretas en bares de mala muerte), y las llamadas telefónicas a cualquier hora.
Y ahí va a estar ella...llorando como una marrana, ingiriendo altas cantidades de azúcares y otras sustancias, encerrada todo el fin de semana en su cuarto y pegada a la caja boba preguntándose por qué a Jennifer Aniston siempre le sale redonda, y a ella se le hace tan difícil seguir...